Las empresas manufactureras tienen el objetivo de producir bienes y obtener ganancias de la venta de estos, por lo que fabrican productos en masa y los ofertan para su consumo, pero ¿la manufactura digital se trata del mismo proceso? ¿se complementan o son independientes?
Durante mucho tiempo hemos sabido que la manufactura es el resultado de la transformación de las materias primas en productos terminados; es una actividad del sector secundario de la economía que por medio de procesos industriales se obtienen bienes listos para su venta en el mercado.
Por su parte, la manufactura digital se entiende como el conjunto de procesos que comprende el diseño, la conformación y la fabricación de productos usando plataformas de softwares industriales que han sido creados para brindar un soporte especializado y cubrir las nuevas necesidades de las empresas.
Se basa en el uso de sistemas y herramientas digitales que permiten el análisis, la integración, el diseño y la producción de diversos productos. Además, contempla cada uno de los materiales y equipos que están involucrados en los procesos manufactureros para lograr una óptima producción.
Como lo mencionamos en una entrada anterior, la industria 4.0 es la manufactura inteligente que integra nuevas tecnologías y saca provecho de la digitalización para llevar a cabo una producción más eficiente, incrementando la calidad de los productos y mejorando el modo operativo de la empresa.
Por lo tanto, la manufactura digital surge gracias a la evolución de la forma en la que se producen bienes de consumo, la cual comenzó con la mecanización de los procesos que se derivó de la introducción de la máquina de vapor. Años posteriores, ya se hablaba de las líneas de producción y montaje en masa que se beneficiaron del uso de la electricidad.
Más tarde, se logró globalizar las comunicaciones y los procesos de producción a través de la automatización, el uso de las computadoras y los sistemas inteligentes que dieron lugar a esta cuarta revolución industrial que incorpora innovación y vanguardia para renovar y mejorar la operatividad de las empresas, volviéndolas más eficientes y productivas.
Aunque la manufactura digital ya es una realidad actual, aún no todas las empresas conocen de qué se trata y las ventajas que les puede brindar. Por ello, a continuación presentamos las principales utilidades que se pueden conseguir a través de esta digitalización especial.
Los sistemas y herramientas de este tipo de manufactura se enfocan en darle el correcto uso a cada uno de los recursos que forman parte de la cadena de producción con la finalidad de aprovecharlos de manera optimizada y sólo los que realmente son necesarios y con ello, reducir gastos innecesarios o desperdicios a la hora de elaborar los productos.
Por otro lado, las empresas buscan satisfacer las necesidades de los clientes, pero ellos se inclinarán por aquella empresa que les ofrezca tiempos de respuesta rápidos, excelente calidad en bienes y una personalización de estos de acuerdo a los requerimientos específicos que solicitan.
Cuando los gastos son mayores a las ganancias, se dice que la empresa está perdiendo rentabilidad, por lo que al integrar soluciones tecnológicas es posible no sólo aprovechar cada uno de los recursos; también es posible reducir los costos de producción gracias a la cantidad de información que se obtienen de ellas y permiten producir sólo lo necesario.
Anteriormente, los consumidores tenían que esperar a que las empresas llevaran a cabo todos sus procesos productivos y posteriormente probar y determinar la calidad de los productos terminados antes de lanzarlos al mercado, lo cual generaba prolongados tiempos de respuesta a las necesidades.
No obstante, con la manufactura digital eso se erradicó debido a que se integran softwares que automatizan las actividades para fabricar bienes que cumplan con la más alta calidad y satisfagan la demanda de los clientes y crear relaciones comerciales en las que exista el beneficio mutuo.
Una de las mayores ventajas que ofrece este tipo de manufactura es que provee a cualquier empresa que la implementa, nuevas competencias que las hacen capaces de responder a las crecientes exigencias del mercado y a los constantes cambios que se presentan en la industria.
Con ella es posible mejorar y crecer de manera continua, y lo mejor es que hay un sistema especializado para cada necesidad y con ello, se mejora la toma de decisiones y por lo cual repercute de manera positiva en cada una de las áreas internas de la empresa y por ende, de forma global también.